Un tipo de pasta por día

José Luis Escobar conoce la cocina del Instituto Italiano de Cultura, en la cual semanalmente se enseñan los secretos culinarios de la península itálica.
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Cursos de cocina
Instituto Italiano de Cultura

La entrada del Instituto Italiano de Cultura no permite adivinar que en su interior, literalmente, se cocina la tradición italiana.

Detrás del protocolo de seguridad del ingreso, y más allá del vestíbulo y de los escritorios de trabajo, está la cocina del inmueble. El personal del centro no es el único que la utiliza, pues cada semana se imparten en ella cursos culinarios.

Desde hace dos años el Instituto agregó este tipo de actividades a su agenda mensual, la que generalmente es cultural. Cada mes hay una temática distinta para colocar sobre el fuego. Si bien los actuales módulos son de cuatro clases, con anterioridad se han impartido hasta de ocho sesiones.

En otros meses se ha enseñado el secreto para preparar pizzas, salsas y postres con un auténtico toque italiano. Y a partir del próximo miércoles se inicia el último curso ordinario del año, el cual se centrará en la preparación de las pastas. Probablemente haya uno más en diciembre, relacionado con los platos navideños.

Cada miércoles, de 10 de la mañana al mediodía, los asistentes aprenden la forma tradicional para preparar sus platos, guiados por la chef Armanda Bartoli. Ella, además de ser una amante de la cocina, es también profesora de italiano en el Instituto. Ha estado desde el inicio del programa culinario.

En las próximas cuatro semanas Bartoli mostrará las técnicas para preparar ravioli, lasaña, ñoquis y fetuchini. Se verá un tipo de pasta por día. La dinámica en la cocina empieza con algo de teoría, seguida de mucha práctica. Hay asistentes que suelen tomar nota, otros prefieren observar, pues Armanda siempre entrega al final de cada clase un recetario.

Público diverso ha tomado estos cursos. Y sin importar la edad, el género, o si el interés es personal o profesional, en todos permanece la satisfacción por compartir y degustar la lección del día. Hay quienes guardan una porción para mostrarla, cual trofeo, en el hogar, en donde replican lo aprendido. La emoción es mayor cuando, en la última clase, se entrega un diploma de participación.

La experiencia en la cocina de Bartoli permite un acercamiento al verdadero sabor de la gastronomía italiana. Ella comenta de las técnicas artesanales para preparar en casa las pastas y las pizzas, alejando del paladar y de su preparación el concepto americanizado de estos platos. También brinda datos históricos de las recetas.

Si piensa que para empaparse de estos conocimientos debe llegar al Instituto cargando sartenes, ollas y un montón de utensilios más, se equivoca. Los Q500 que cuesta el curso le proporcionan todos los ingredientes que empleará, así como un recetario y un diploma. Lo único que debe llevar es una gabacha.

Paste & sughi
Las pastas italianas (paste & sughi) que se prepararán en este curso son: ravioli, lasaña, ñoquis y fetuchini, tanto en salsas rojas como en blancas.

Cupo limitado
El mínimo de personas por clase es de cinco, y el máximo de 15. Los cursos están abiertos al público en general.

Contactos
Instituto Italiano de Cultura. 16 calle 2-55, zona 10. 2263-0394. Visite el sitio del Instituto, o escriba a iicguatemala@esteri.it.


T. José Luis Escobar, jescobar@sigloxxi.com
F. Archivo Siglo 21.