Julio Roberto Prado
Coloqué la taza de café sobre el balcón, cuidando que las gotas del aguacero no la alcanzaran. En la cancha de futbol de la vecindad estaban jugando un partido. Bajo la intensa lluvia, ellos seguían gritando como si fuera la final de la copa del mundo. Y quizá para ellos lo era: su barrio, su universo.
Seguir leyendo.
domingo, 6 de junio de 2010
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario