Jack Schuster / Bichología
La vez pasada escribí de unas arañas venenosas comunes, las viudas cafés y negras. Otra araña peligrosa de Guatemala es la violinista, también llamada la reclusa. Su veneno que causa una reacción autoinmune; sus anticuerpos empiezan a atacar los tejidos en la vecindad de la mordedura con el resultado que la herida no se cura con facilidad y aumenta de tamaño, a veces, llegando al hueso. Fea. La herida, no la araña. Bueno, tampoco está muy chula. Seguir leyendo.
domingo, 18 de abril de 2010
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